España es uno de los principales países de Europa de tránsito y destino para la trata de mujeres con fines de explotación sexual. Según datos del Ministerio del Interior, en 2024 las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado liberaron a 1.794 víctimas, un porcentaje un 22 % mayor que el correpondiente al del año anterior.
En total, la Policía Nacional y la Guardia Civil realizaron 419 operativos, detuvieron a 966 personas y desarticularon 110 redes criminales dedicadas a la trata. Entre las víctimas rescatadas, 1.281 estaban siendo prostituidas, aunque sólo en 513 casos se pudo confirmar su vinculación directa a redes organizadas.
En contextos específicamente ligados a la trata con fines sexuales, según las fuerzas de seguridad del Estado, fueron liberadas 256 mujeres, entre ellas cinco menores de edad. A estas se suman otras 376 víctimas rescatadas de situaciones de prostitución forzada, con 11 menores implicadas.
Mujeres migrantes con cargas familiares y estudios, principales víctimas
Según los datos de la ONG Fiet, que cuenta con un proyecto dedicado a la atención integral de estas víctimas, el perfil de las mismas es el siguiente:
- Edad media: 35 años.
- Origen migrante: el 96 % de las mujeres son extranjeras, y el 70 % carece de documentación legal.
- Procedencias más frecuentes: Colombia, Venezuela, Paraguay, Nigeria y Camerún.
- Cargas familiares altas: el 95 % sostiene a familiares económicamente desde España.
- Formación media o universitaria: Algunas de estas mujeres llegan a nuestro país con formación media o universitaria, pero terminan en circuitos de explotación por falta de opciones laborales o engaños en el país de origen
“Nos encontramos con mujeres que fueron enfermeras, maestras o administrativas en su país. El empobrecimiento, las violencias previas o la necesidad las han empujado hacia esta esclavitud moderna”, explica Fiona Bellshaw, alma máter de FIET y directora de relaciones institucionales de la ONG.
Esta organización, presente en cinco Comunidades Autónomas: Madrid, Galicia, País Vasco, Comunidad Valenciana y Melilla, a través de su proyecto Rescatar y Restaurar ofrece a las víctimas ayuda psicológica, sanitaria, jurídica, educación, formación, inserción laboral, formación materno-educativa, integración, recreación y ocio, alojamiento y atención 24 horas. “El objetivo es prevenir la trata de seres humanos con fines de explotación sexual y/o laboral, y prromover la atención integral de personas víctimas de este delito con el fin de facilitar su integración social y el restablecimiento de sus derechos”; subraya Bellshaw.
Fuente: https://www.elplural.com/