La respuesta es un rotundo sí. Cada día ofrece la oportunidad de contribuir al bienestar de los demás, pero ¿por qué tantas personas postergan esta noble labor? En este artículo, exploraremos las excusas comunes que impiden el compromiso con el voluntariado y cómo superarlas. Descubre cómo convertir tus intenciones en acciones significativas y marcar la diferencia en el mundo, paso a paso.
No existe un día específico para realizar trabajo voluntario; cada día puede convertirse en una oportunidad para ello, y solo aquellos con verdaderas intenciones optan por hacerlo.
A menudo escuchamos excusas que nos impiden tomar acción: “Hoy no es el día para comenzar la dieta”, “Hoy no es el día para hacer ejercicio”, “Hoy no es el día para empezar a estudiar”, y así sucesivamente. Estas excusas se repiten tanto que llegan a ser aceptadas como verdades por nuestra mente, condicionándonos a creer en ellas.
Es lamentable observar cómo algunas personas se aferran a estas excusas, impidiéndose a sí mismas y a los demás avanzar hacia sus objetivos. Sin embargo, es importante reconocer que nuestras intenciones solo se vuelven realidad cuando las llevamos a la acción.
En mi experiencia dirigiendo programas de voluntariado, he escuchado una amplia gama de excusas: desde no sentirse bien hasta compromisos sociales. Sin embargo, lo crucial es comprender que al poner en práctica nuestras intenciones, estas se materializan. Si deseas realizar trabajo voluntario, es fundamental pasar a la acción sin buscar excusas.
Es cierto que surgirán distracciones y tentaciones que podrían desviarte del camino del voluntariado. Pero recuerda, el trabajo voluntario, al igual que cualquier otro tipo de labor, requiere esfuerzo. No te engañes a ti mismo pensando que será fácil; se necesita enfoque, decisión y determinación, especialmente al principio.
Los primeros días de voluntariado pueden resultar desafiantes, ya que nos enfrentamos a realidades diferentes a las que estamos acostumbrados y somos puestos a prueba en cuanto a nuestra paciencia y capacidad de adaptación. Sin embargo, este período inicial de ajuste dará paso a una experiencia enriquecedora y gratificante.
No pretendo desanimar a aquellos que desean ser voluntarios, ni exagerar los desafíos que enfrentarán. Simplemente quiero ofrecer una visión realista y sin filtros de lo que implica el trabajo voluntario. A pesar de las dificultades, el resultado de tu esfuerzo será gratificante y la sensación de contribuir al mundo de una manera significativa será única y maravillosa.
Fuente: https://diarioresponsable.com/
